miércoles, 17 de febrero de 2021

Eloy Román García

Un lobo de mar a la antigua usanza

El que en 1997 se convirtiera en el primer canario en dar la vuelta al mundo, a vela y en solitario, murió como vivió, con una gran fortaleza de espíritu y una valentía fuera de lo común de las que tuvo que valerse desde que, en agosto de 2002, le diagnosticaran un cáncer de pulmón incurable, del que fue conocedor en todo momento. El 17 de febrero de 2003 fallecía Eloy Román García, una excelente persona y un auténtico lobo de mar a la antigua usanza.

Por Ángel Alonso (OLL)

Eloy murió con 74 años, superando en seis la edad que tenía cuando completó su vuelta al mundo, una experiencia que puede parecer tremendamente atractiva pero que hay que imaginar en su verdadera dimensión, la de una persona de 68 años, con sus limitaciones y en especial una que muy pocos conocían: la diabetes… Él fue superando cada obstáculo y salió airoso de todas las dificultades que tuvo que afrontar durante su travesía y, aquel viaje, el sueño de su vida, le llenó el espíritu y le marcaría sus últimos años.

Nacido en 1929 en la localidad de Los Cristianos en el sur de Tenerife, Eloy tuvo una vida muy completa y llena de cosas importantes. De profesión piloto de la Marina Mercante, recorrió todos los océanos del mundo estrechando su relación con una de las grandes pasiones de su vida: la mar.

Tras cumplir su etapa de marino profesional y, más tarde, desempeñar diversas ocupaciones, Eloy se jubila y es entonces cuando decide reencontrarse pasionalmente con la inmensidad de los océanos adquiriendo un yate de doce metros y medio de eslora, con un sugerente nombre, Nauta, que años más tarde entraría en los anales de la náutica canaria.

Eloy está decidido a cumplir el sueño de su vida y, con el pragmatismo y la valentía que siempre caracterizaron su vida, lucha contra el tiempo sabedor de que la edad está en su contra y que no puede demorarse mucho más. No obstante, antes de lanzarse a circunnavegar el planeta, decide realizar una prueba de navegación en solitario y el 16 de diciembre de 1994 parte del sur de Tenerife dispuesto a alcanzar las costas de Venezuela y regresar.

Tras llegar a Venezuela y recorrer un gran número de islas y territorios bañados por el Mar Caribe, Eloy regresa a casa el 13 de julio de 1995, perfectamente adaptado a la navegación en solitario y convertido en un auténtico lobo de mar en toda la dimensión de la expresión. Todo está dispuesto y ha llegado el momento de afrontar su gran aventura. Está a punto de cumplir los 68 años y sabe que está en el límite. No le queda tiempo. Debe de hacerlo ahora o nunca…

Emulando a míticos marinos de tiempos pasados, Eloy zarpa de Los Cristianos el 10 de octubre de 1996, con la única compañía de su perro Grumete, en una aventura de unas 40.000 millas marinas que le lleva a recorrer escenarios paradisíacos como el Mar Caribe, la Polinesia, Indonesia, las Islas Maldivas en el Indico o el Mar Rojo… Tras atravesar el Mediterráneo de levante a poniente, el tinerfeño completa su vuelta al mundo a las doce y media del mediodía del 20 de junio de 1997, cuando arriba al puerto de Los Cristianos entre la aclamación popular, el estruendo de las sirenas de las embarcaciones atracadas y el sonido de una isa canaria interpretada desde el muelle por un grupo folklórico local.

Tesón, coraje, espíritu de sacrificio y, sobre todo, ganas de vivir, fueron los valores que, junto con el sonido de la mar y el romper de las olas en el casco del barco, acompañaron a Eloy Román García en su periplo. En él vivió momentos duros y difíciles, pero también maravillosos y entrañables. Su hazaña quedó registrada para la posteridad como la primera vuelta al mundo realizada por un canario a vela y en solitario. Sin duda un ejemplo de superación para muchos.

Humildemente quisiera que estas líneas sirvieran como un modesto homenaje a la memoria de un buen amigo y de un gran hombre, que siempre se mostró orgulloso de ser el primer Miembro de Honor del Club de Exploración y Aventura de España 1997 y también llevó a gala ser colaborador del programa radiofónico Objetivo: La Luna.

                                                                                                        

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